Por Martin Lencina
La política pública en materia económica promocionada por el ministro Sergio Massa para mostrar que el gobierno toma protagonismo en su pelea contra la inflación, en realidad es un acuerdo con las grandes empresas para realizar aumentos escalonados. El aumento de los combustible alrededor del %4 del domingo pasado, le sigue otro aumento para Marzo del % 3,8.
Estamos ante políticas de ajuste económico, implementadas desde el gobierno Nacional, dónde todo el peso recae sobre la sociedad argentina. La inflación está asegurada, para desgracia de todos los argentinos. La suba de los combustible repercuten de forma automática sobre el resto de la economía, a través de la suba de precios que todos padecemos (transporte, combustible, comida, etc,.)
Hoy los grandes ganadores de esta economía son las grandes empresas, beneficiadas por la suba del dólar, por la quita de impuestos y el aumento de precios. El gran perdedor por paliza, es el «SALARIO». Los sindicatos, salvó Camioneros, son cómplices de un gobierno que gobierna para beneficios de las grandes empresas, y encontrá de los ciudadanos comunes.
Este último año del gobierno del FdTs, a través de estás políticas, demuestra que el panorama económico no va a mejorar en términos de recuperación del salario real, sino que la inflación va a continuar en forma escalonada, perjudicando cómo siempre al eslabón más débil.