En el territorio que hoy se lo conoce como General Rodríguez, se la conocía como los “pagos del Luján Arriba”
Por Ares Martin
«Cantemos a la leche cuyo gusto sabe a beso infantil en nuestra boca. La leche, plata líquida del pobre, que en las jícaras blancas alboroza, y en el aro del queso se almoneda” la frase de Leopoldo Lugones, “A los ganados y las mieses”.
A principios del siglo XX, la producción láctea de los tamberos empezó a hacer la principal actividad económica de la zona por la gran extensión del territorio y la rica fertilidad al estar en una de las regiones más ricas del país como se la conoce a la “Pampa Húmeda”, con su clima templado y sus campos fértiles, estas bondades que ofrece la región pampeana son muy prosperas para la actividades agropecuarias y los pioneros de General Rodríguez lo aprovecharon para sacar provecho instalando tambos en esta localidad y alrededores.
A medida que pasaban los años, General Rodríguez empezaba a ser conocido por ser el principal lugar de producción láctea y sus derivados como los quesos y la manteca. A medida que se iba poblando, venían inmigrantes (especialmente italianos) a comprar tambos y, entre sus conocimientos sobre la producción de leche y los subproductos más las ventajas de las razas bovinas lecheras como el Holstein, Jersey, Normando, Holando Argentino; permitía una mejor calidad en los productos.
Pero la culminación de la fama láctea de General Rodríguez será con la llegada en en 1927 de los hermanos Antonino y José Mastellone para dedicarse a la elaboración de quesos de tipo italiano como la muzzarella o el parmesano.
El 29 de octubre de 1929 nace oficialmente la empresa “La Sereníssima” cuando Antonino Mastellone contrajo matrimonio con Teresa Aiello, por esta razón, es considerado como la fecha de fundación.
Se le puso ese nombre en honor a la escuadrilla de aviones denominada «La Sereníssima», que comandaba el poeta italiano Gabrielle D’Anunzio durante la Primera Guerra Mundial. El logotipo, es verde, blanco y rojo porque justamente representan los colores de la bandera italiana, el de su país de origen.
Tras la muerte de Antonino, en 1952, asume la conducción de la empresa su hijo mayor Pascual Mastellone junto con sus hermanos y se va a llamar: “Sociedad Colectiva Mastellone Hermanos”.
Con la conducción de Pascual Mastellone, La Sereníssima llegará a lo más alto en la comercialización por sus innovaciones como ser la primera en vender leche pasteurizada y en comercializar el primer sachet plástico de leche. Además de las innovaciones, hay que destacar la implementación de una distribución de artefactos fríos que le permitía la mantención y la distribución de sus productos y las técnicas que permitieron mejorar tanto la calidad como la higiene de la mercadería.